Ibera Auri conecta España y Francia en la música barroca de los siglos XVI y XVII

• El grupo valenciano inicia el segundo fin de semana del ECOS Festival abriendo las puertas al conocimiento del pasado histórico entre ambos países, con piezas que reflejan los matrimonios reales de la época

• Delle Donne Consort mostrará esta noche en Mula la capacidad de la flauta dulce para conectar diferentes lugares y culturas en una exploración musical del siglo XVI al XXI

La Mancomunidad Turística de Sierra Espuña vuelve a sumergirse en un viaje musical al siglo XVII. El segundo fin de semana del ECOS Festival Internacional de Música Antigua de Sierra Espuña ha acercado hasta la Ermita de los Remedios de Pliego al grupo valenciano Ibera Auri, que con su espectáculo ha abierto las puertas al conocimiento del pasado histórico que conectó la música española y francesa durante este periodo.

El ensemble vuelve a participar en la convocatoria tras estar presente en su edición ‘online’ en 2020, disfrutando ahora del entorno del territorio y de la cercanía de un público que quiso conectar con la música antigua en esta cita. La formación, compuesta por Gabriel Belkheiri (canto y flauta de pico), Laia Blasco (canto y flauta de pico), Lidia Rodrigo (clavecín y flauta de pico), Jeremy Nastasi (cuerda pulsada), y Ana Nicolás (percusión histórica), mostró su interés por la expresividad de la música barroca francesa y de influencia española. Su base es el repertorio ‘airs de cour’, en el que han indagado para descubrir los hechos que unieron a estas dos naciones y cómo se plasmó esto en la música. 

“El eje de estas músicas son los matrimonios reales españoles y franceses a principios del siglo XVII”, cuenta Laia Blasco, haciendo referencia a ese pacto de tregua de diez años que palió las tensiones políticas entre ambos países y que produjo estas uniones. Así, el amor, los matrimonios y personajes históricos y reales, e incluso la temática erótica, protagonizan las letras de estas músicas. “Esta variedad de letras articulan nuestras historias, las cuales nos abren las puertas y nos dejan ver un pasado mucho más luminoso y moderno de lo que podríamos haber imaginado”, añade. 

Ibera Auri demostró su entusiasmo por formar parte de la sexta edición del ECOS en un concierto mágico. “Para nosotros ECOS Sierra Espuña supone una gran oportunidad para mostrar nuestro trabajo como grupo, pues nos permite visibilizarlo en un festival de renombre, así como aprender y mejorar nuestra gestión y organización interna gracias a los ECOS Lab”, agradecen. 

‘N’espérez plus mes yeux’, ‘Dove ne vai crudele’, de Antoine Boësset (1587-1643), y ‘Souffrez beaux yeax’ y ‘Por la verde orilla del claro tormes’ de Etienne Moulinié (1585-1665), así como piezas anónimas entre otras, sonaron en la voz e instrumentos de Ibera Auri en esta primera cita.

Su concierto fue en una “normalidad casi absoluta”, tal y como recalcó el alcalde de Pliego, Antonio Huéscar, quien destacó cómo el carácter internacional del Festival promueve que “cada vez haya más visitantes y más afluencia y que se conozca el territorio”.  “La labor que se hace es maravillosa porque ayuda a todo el entorno de la Región de Murcia a promocionar este tipo de música que eleva el alma, con grupos de experiencia internacional”, añadió Senena Corbalán, vicerrectora de Investigación de la Universidad de Murcia. 

Diversión con un lenguaje adaptado

La jornada de hoy la vuelve a abrir el ensemble valenciano con una cita dentro del ECOS Kids. En este concierto familiar, que tiene lugar a las 10.30horas en la Plaza de la Iglesia, Ibera Auri va más allá de una colección de piezas musicales para desarrollar una historia destinada a los más pequeños, con textos adaptados a su edad “para que puedan divertirse y sentirse conectados con lo que narramos”. “El público más joven es el más apto para la ‘fantasía’ y crearemos un ambiente de cuento de hadas para ellos”, señala Laia Blasco desde la formación. 

Las flautas belgas suenan en Mula 

Esta noche es el turno de Delle Donne Consort, a las 21.30 horas en el Claustro del Convento de San Francisco. El conjunto de flautas belgas nació del impulso de descubrir e interpretar el rico repertorio de música antigua con la práctica de la interpretación histórica, además de traducir ese repertorio para traerlo al presente de una forma única. Así, Serena Agosto (Italia), Lieve De Sadeleer y   Frederike Van Lindt (Belgium), y Kinga Ludvai (Hungría) comenzaron su andadura en 2020, siendo en esta ocasión la primera vez que forman parte del ECOS Festival como grupo residente. 

En su espectáculo titulado ‘El arte de la imitación’, llevarán a la audiencia a una exploración del siglo XVI al XXI para conectar diferentes lugares y culturas y mostrar diferentes facetas de la flauta dulce. Además del pase nocturno, también ofrecerán un concierto familiar mañana domingo a las 10.30h en el mismo emplazamiento.